El glúteo es un punto sensible para la mayoría de las mujeres. Todos querrían que fuera firme y tonificado, eventualmente sin celulitis y sin imperfecciones. No se trata solo de una cuestión estética, sino de autoestima. Mirarse en el espejo y sentirse a gusto con la propia imagen refleja va más allá de un simple capricho estético.
Por supuesto, tener unos glúteos bonitos, tonificados y perfectos requiere perseverancia y compromiso, como todo lo relacionado con nuestro cuerpo y nuestra salud. Sin embargo, afortunadamente hay algunos trucos que se pueden adoptar para simplificar un poco la cuestión.
Una alimentación saludable y un estilo de vida equilibrado:
Gracias a una buena alimentación compuesta de vitaminas, fibras, proteínas y una gran cantidad de agua, puedes prevenir y reducir la aparición de celulitis, al mismo tiempo que obtienes beneficios para todo el cuerpo.
Haz ejercicio: ¿Cuáles son los ejercicios más efectivos para alcanzar tus objetivos de tonificación?
El glúteo es el músculo más poderoso del cuerpo y es necesario entrenarlo con cargas pesadas; no se recomienda hacer cientos de repeticiones con el propio peso corporal, sino que se sugiere concentrarse en ejercicios específicos:
Hacer sentadillas: es un ejercicio que se puede realizar con el peso del cuerpo o utilizando una barra de pesas (una barra de acero que puede ser cargada en sus extremos con pesos). Además de entrenar la masa muscular de los muslos y los glúteos, las sentadillas aportan numerosos beneficios al resto del cuerpo: resistencia, coordinación, equilibrio, mejora de la fuerza y del tono de las partes abdominales y de la columna vertebral.
Zancadas: es un ejercicio que se puede realizar con el peso del cuerpo, en equilibrio o utilizando mancuernas (instrumentos de diferentes pesos sostenidos en cada mano). Existen tres tipos de zancadas: frontal, hacia adelante y lateral.
Piernas estiradas: un entrenamiento útil para fortalecer los músculos lumbares y reforzar toda la parte posterior del cuerpo: el bíceps femoral. Este ejercicio se realiza con el uso de mancuernas.
Postura:
La forma en que nos sentamos también puede contribuir a crear una acumulación indeseada de grasa en los glúteos. Mantener una posición correcta también es beneficioso para la espalda y los glúteos.
Caminata y escaleras:
Cuando no tenemos el deseo o la oportunidad de realizar una actividad física completa, siempre podemos recurrir a estas pequeñas medidas, especialmente cuando estamos de vacaciones. Caminar al menos una hora al día a un ritmo rápido es un excelente ejercicio, y también será agradable hacerlo en la playa. Siempre es mejor regresar a casa por las escaleras en lugar de por el ascensor. Las escaleras son un remedio universal para tonificar los glúteos.